domingo, 30 de julio de 2006

No te delataré


Libro de relatos "El Viaje"
(Editorial Punto Reklamo. Varios Autores)

Mercedes Martín Alfaya

Yo tenía una bicicleta verde con pegatinas de colores y un faro narigudo que oscilaba risueño en mis peripecias de equilibrio. Un día, se cruzó en mi camino la chica más bonita del pueblo, y mi caballo metálico relinchó desconcertado ante la mística aparición. Caminaba erguida, líquida, envuelta en la sedosa pulcritud de una primavera recién estrenada. Aquella tarde, mi rocín aventurero y yo, bajo la silueta recortada en el horizonte de una gigantesca naranja etérea, tomamos juramento de nobleza, y con la bendición del cielo, partimos a la conquista de tan ilustre damisela. Al regresar a la , mi padre nos confiscó un mes sin salir por desatender las cuentas y obligaciones con la maestra— que se presentó en mi casa antes de la cena— Sería conveniente que vigilara al chaval, apuntó doña Rosario. Y mi padre clavó sus puntiagudos ojos de tormenta sobre mí, señalando la puerta de mi habitación con el dedo: ¡Y deja la bicicleta en el patio! — gritó.
Los caballeros no lloran, aunque el hollín de la tristeza deslució con el tiempo mis amaneceres quijanos para convertirme en alguien de provecho. Nunca más se supo qué fue de mi bicicleta ni de aquella chica que se evaporó como pompa de jabón en el aire.¡Buen provecho, mi truhán! No te delataré, “que al buen callar llaman Sancho”

No hay comentarios: